TRAVESIAS DE UNA PANAMEÑA: Picnic en Pandemia
¡HOLA AVENTUREROS!
Como ha sido costumbre últimamente me disculpo por haber tardo un poco con nuevo contenido; pero aquí estoy para contarles mi experiencia haciendo una de las actividades más sencillas de todas pero que en estos tiempos parece una misión imposible.
Todo comenzó conmigo sintiendo más calor de lo normal; y si lo sé, vivo en Panamá debería estar acostumbrada a eso, pero cuando entramos a verano es incluso para los que nacimos aquí lidiar con el clima; lo que me llevo a pensar en todas esas veces que salía con mis amigas en verano a hacer picnic junto a un río o sobre una montaña. Así que cuadre un día para esto, y fue complicado el trabajo en casa tiene esclavizada a todas mis amistades con días libres muy diferentes a los que yo que tengo, así que fui por mi cuenta; siempre es gratificante darse un tiempo para sí mismo.
Hay un lugar en medio de la ciudad de Panamá, en donde puedes hacer distintas actividades recreativas, tienen gazebos, baños, juegos para niños, muchísimas áreas verdes, anfiteatros e incluso hasta una biblioteca; se llama Parque Omar Torrijos.
Las instalaciones actuales de este parque eran propiedad del Club de Golf de Panamá, que era un poco más grandes que las instalaciones actuales del Parque Recreativo. En el año 1973, el General Omar Torrijos Herrera hizo un trato con el Club, por 2.1 millones de dólares ,1 por el cual oficialmente el 15 de septiembre de 1973, La Estrella de Panamá publicó oficialmente un mapa, para algunos poco creíble, de las instalaciones del Parque Recreativo. En 1981, tras la muerte del General Torrijos, éste parque y el parque nacional Omar Torrijos en Veraguas fueron bautizados en su honor.










El parque de una longitud de aproximadamente 5 km, es un lugar ideal para realizar deportes y actividades físicas, tales como ejercicios y juegos recreativos. Este parque es responsabilidad del Despacho de la Primera Dama de Panamá, sin embargo se ha discutido su traspaso a la Alcaldía de Panamá.
Al monto de ir pase a comprar algunas bebidas, frutas y galletas; use la línea del metro 1 para llegar a la estación de metro Fernández de Córdoba en donde tome un taxi, llegar em tomo menos de 5 minutos, de igual manera se puede llegar caminando desde la estación, pero puede tomar 15 minutos o un poco más.





Al llegar me di cuenta de que en realidad estaba demasiado vacío para ser una tarde de verano; había varias familias una distancia más que prudente unas de otras. En Panamá tenemos una cuarentena total los fines de semana, así que para ser un viernes por la tarde se encontraba muy vacío; aunque si llegan a ir lo que más podrán ver son personas haciendo ejercicio. En fin, me tomo un momento encontrar el sitio adecuado; separado de los niños y sus pelotas de football y con la gran sombra de un árbol, instale mi manta y coloque mis aperitivos con la esperanza de que alguna ardilla no me robara nada en un descuido; luego de esto al fin me quite mi mascarilla y pude sentir esa brisa de verano en mi rostro, escuchar a niños gritar entre risas, ver como unos adolescentes hacían carreras para saber quién era más rápido y por un momento se me olvido todo lo que había pasado el año pasado y que seguía pasando, no podía creer lo mucho que nuestra realidad había cambiado.
Paso la mayor parte del tiempo leyendo un libro, la otra parte comiendo; cuando sentía que me quedaría dormida empecé a recoger todo, me puse mi mascarilla y emprendí mi camino a casa.
El Parque Omar es el lugar más recomendado para esta actividad ya que tiene muchísimo espacio, la cinta costera sigue siendo un lugar muy concurrido, pero no está prohibido, en ciertas ocasiones algunos oficiales te piden que poner tu mascarilla debido a la cantidad de gente.
Me gustaría que se dieran la oportunidad en su visita a Panamá o los que ya vivan aquí de hacer algo distinto que todo turista habitual hace o como panameños que no hacemos por creer que cosas como estas no pueden hacerse en nuestro país.
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